domingo, 8 de septiembre de 2013

Sentimiento unilateral.

Sigo dándome cabezazos con el filo del vaso antes de saltar a ese mar de ron y coca cola,
negro como la noche,
negro como tus ojos.
La vida pasa demasiado rápido a mi alrededor,
todo el mundo viene, va.
Y yo los veo. Mientras me quedo quieta sentada en la acera, como esos bancos de las estaciones.
Medito. Y a la tercera, o quizás cuarta copa me vuelvo pseudo filósofa y creo comprender el sentido de la vida.
Nacemos para ser felices efímeramente pero también para hacer felices a los demás.
Nacemos para ser libres y correr en libertad. Para correr y cometer locuras.
Y ahora un chupito, bendita llave del delirio.
En frente mía. En otros brazos, otra boca.
Otra falda con más vuelo que la mía.
"Eres demasiado rara" dijiste.
Y con eso rompiste mis ilusiones de ser especial.
Novio. Y qué razón.
No vio cómo la mirabas.
No vio cómo ya no contestabas sus mensajes.
No vio cómo abrazabas a otras.
No vio tu rechazo.
Ojalá no te viera a ti tampoco.

2 comentarios:

  1. Este pedacito de tu texto:
    'En frente mía. En otros brazos, otra boca.
    Otra falda con más vuelo que la mía.
    "Eres demasiado rara" dijiste.'
    Es demasiado.. ♥

    ResponderEliminar