sábado, 25 de mayo de 2013

1:20

A veces la tristeza me invade,
o quizás sólo sea soledad,
o nostalgia, fiel amante.
Esas veces las palabras me resbalan,
encontrando un punto de fuga en las manos.
Manos  que acarician, si.
Que acarician esta triste pluma que habla demasiado
y se entiende demasiado poco.

A veces, cuando nadie mira,
te pienso y lloro tinta.
Y si miran, te pienso igual
y dejo la mirada perdida en el
límite entre tu boca y la mía.

A veces, me enamoro,
y recuerdo eso del Fall in love del inglés,
porque en eso de caer ya se advierte del tropiezo,
y el ser humano es el único ser
que tropieza dos veces en la misma piedra.
Y ya se sabe, no hay dos sin tres.

Ni yo sin ti. Pero, ¿Y tú sin mi?
A veces, sólo a veces,
parece que me quieres
como nunca jamás me quisistes.
Y a veces, demasiado a veces,
parece que te quiero,
como nadie nunca jamás te quiso.


Silencio.

A veces el silencio
convoca recuerdos,
comedias de valentía,
espejismos de cuento,
vaivenes a horcajadas, 
desconsoladas rabias,
manifiestos de soledad
sed y hambre de ti.

pero otras veces es
solamente silencio
soledad como estilo de vida.
mares sin peces,
bosques sin árboles,
tristeza que chorrea
a lo largo de estas palabras.
Grito mudo.

sábado, 18 de mayo de 2013

You're the only exception.

Puedo ser fiel
o infiel,
(según me comprometa)
Puedo disimular, mentir, ocular, decir a medias,
ideas y emociones
o ser tan clara y directa como los niños.
Puedo planear un romance para toda la vida,
para 7 meses,
o quizás sólo y simplemente una aventura.
Tú pídeme lo que quieras.
Pero no me pidas querer a medias.
Yo no soy yo sin ser mis defectos, y mis afectos también.
No soy como los demás, y tú tampoco.

Mientras tanto, nos miramos a los ojos.
Y dejamos al mundo con su cerveza sin alcohol,
su café sin cafeína,
sus películas sin emociones
y sus noches sin amor.
Mientras tanto, seguimos siendo la excepción.

viernes, 10 de mayo de 2013

Us.

Quizás nunca fuésemos tú y yo.
Ni yo y tú.
Quizás siempre fuimos nosotros.
Nunca dejamos de serlo, ni cambiamos demasiado.
Un poco más viejos quizás, un poco más sabios.
 Menos inocentes, más maníacos.
Sedientos de amor. Sedientos el uno del otro.
Lejanos y eternos, queriéndonos como sólo lo hacíamos nosotros.
Pero siempre nosotros, y no otros.

jueves, 9 de mayo de 2013

Nunca es tarde para decir te quiero.

Te digo adiós, aunque te quiero todavía...
No sé si he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste...O si te quería...
O puede que quizás nos quisiéramos demasiado los dos.