miércoles, 28 de marzo de 2012

(des)encanto.

Lo siento, pero tengo que decirlo. No hables, mírame y trata de entenderlo.
Yo no sueño con noches en vela aguantándote la mirada. No deseo que nades a mi lado, que cruces medio mediterráneo por mí.
No buscaré tu mirada en ningún aeropuerto, ni te abrazaré como en los anuncios al verte llegar entre el gentío.
Tampoco deseo compartir ninguna puesta de sol contigo, ni saborear en secreto un after eight antes de las ocho.
Que no son tus manos las que busco por las noches, ni tu aliento aquel que quiero respirar. No pretendo parecerte perfecta, mi cuerpo no busca tu calor, ni siquiera permite que me desees. No quiero que mueras por mí, y mucho menos que mates en nombre de tan deshonesto fin. No soy un cielo, ni siquiera lo merezco, no te engañes, soy uno más entre el resto de mortales.
No quiero que me quieras.Porque yo ya bebo de otras bocas, nado en otras miradas, me rindo ante otras caricias, inspiro de otro aliento. Lo siento, pero deberías de saberlo.
No intentes compararte con el dueño de mis suspiros, ni intentar recordarme todo lo que tenemos en contra, siempre he preferido avanzar a contracorriente, en un rumbo deseado (que no por ello fácil)  y no dejarme llevar por la marea, inestable y alocada siempre.
Lo siento, pero no soy para tí, ni quiero serlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario